Si su nombramiento es confirmado por el Senado del Estado de Nueva York, el gobernador habrá colocado a la cabeza de la Autoridad, no a un conocedor del entramado mundo de los transportes públicos, sino a un político con buenas conexiones en las altas esferas de la política neoyorquina. No en vano, los cargos que ocupó durante el mandato de Giuliani están considerados como los de mayor poder, tras el del propio alcalde.
Con su elección, Cuomo lanza el mensaje de que un político, antiguo banquero, puede ser la persona idónea para acabar con los ya crónicos problemas financieros que sufre la agencia. Además, Lhota, de 57 años, es un Republicano cuya elección puede ser del agrado de legisladores conservadores de las áreas suburbanas, inclinados a eliminar las tasas impuestas para ayudar al transporte de masas (“payroll tax”).
Su elección contrasta con el perfil de Walder, un tecnócrata especialista a nivel mundial del mundo de los transportes públicos. Durante los dos años que ocupó el cargo, trajo novedades en el metro neoyorquino, como los contadores en los andenes, redujo costes y mejoró las comunicaciones con el usuario.
Hijo de un teniente de policía de Nueva York, Lhota creció en el Bronx y en Long Island, obteniendo una licenciatura “cum laude” en la Universidad de Georgetown y el máster en administración de negocios (M.B.A.) en la Escuela de Negocios de Harvard.
Tras su paso por la banca de inversiones, se unió al equipo de Rudolph Giulini en 1994, convirtiéndose en uno de los lugartenientes del alcalde, pero manteniendo la independencia respecto del partido cuando fuese necesario. En la actualidad ocupa el cargo de vicepresidente ejecutivo para la administración de Madison Square Garden.
Duro negociante, era conocido por su franqueza en el diálogo con sus oponentes, granjeando admiración entre estos.
Ya fue miembro de la Junta de la MTA en el período comprendido entre el 14 de diciembre de 1999 y el 26 de abril de 2001.
Además del nombramiento de Lhosa, Cuomo anunció el nombramiento de dos personas muy conocedoras del sector del transporte público. Nuria Fernández, quien ocupa actualmente el cargo de vicepresidenta senior de CH2M Hill, una firma de ingeniería, construcción y servicios de operaciones para negocios y gobiernos en todo el mundo. Fernández ocupó anteriormente el cargo de Comisionada del Sistema de Aeropuertos de Chicago, dirigiendo todas las operaciones aeroportuarias, la planificación, ingeniería y servicios de gestión en los aeropuertos de O’Hare y Midway. Ocupó cargos ejecutivos en el Departamento de Transportes de Estados Unidos, la Autoridad de Tránsito del Área de Washington y la Autoridad de Tránsito de Chicago. Además, nombrará a Karen Rae, una administradora federal de ferrocarriles, como subsecretaria de transportes estatal.
Desde el 21 de octubre, fecha efectiva de la renuncia de Walder, ocupa la presidencia interina de la MTA Andrew M. Saul, miembro de la Junta desde el 17 de septiembre de 1996.
Fotografía: Metropolitan Transportation Authority
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